5 de marzo de 2011

5 de marzo de 2011: Crónica intempestiva de un viaje (XXXVII). Treptower Park


5 de gosto de 2010. Cuarta parte.

"Espoleados probablemente por la certidumbre de que el día que volveremos a pasar en Berlin a la vuelta de Polonia no nos dará mucho juego decidimos reservarlo para el Sony Center de la Postdamer Platz y algunas compras que nos puedan quedar pendientes, y tras comer un sandwich en el Tiergarten cogimos el S-Bahn rumbo al barrio de Treptow donde, como constaba en una guía que compramos en la Friedrichstrasse el día que visitamos el antiguo distrito gubernamental nazi, se levanta el memorial más importante del Ejército Rojo en Berlin.

Ha sido una última concesión de Esther y Clàudia pero también, en cierta manera, una lógica consecuencia de la consagración al tiempo histórico de la II Guerra Mundial en que hemos convertido nuestra estancia en los últimos días. Hemos estado viviendo y recorriendo los trazos del Berlin de 1933 a 1948 y nos hemos empapado tanto que ahora Berlin se ve con otra luz imaginaria: el pasado late con fuerza y no es una simple reliquia turística sino un enjambre de acontecimientos, de palabras, hechos y, ya, espacios.

Puede que de ahí que la visita al memorial de Treptower Park se haya rodeado de la solemnidad que faltó en los primeros días de andanzas por el pasado. También ayuda que el mausoleo sea gigantesco y esté alejado de la bulliciosa zona de la Puerta de Brandenburg.

Adentrándonos, tras bajar del S-Bahn, por el amplio y descuidado parque de Treptow no hemos encontrado ninguna señal que nos condujera al monumento. Hemos preguntado a un chico que, algo extrañado, nos ha indicado el camino. Tras cruzar una avenida que da la impresión que separa en dos el parque encontramos el arco de triunfo de mediano tamaño que preside la entrada. La frase "Ewiger ruhm den Helden die für die Freiheit und Unhabhängigkeit der sozialistischen Heimat gefallen sind" (algo así como "Gloria eterna a los héroes caídos por la libertad e independencia de la patria socialista") y su correspondiente traducción rusa (o al revés, tal vez el original fuera ruso) gobiernan el frontispicio escoltando una corona de laurel con una estrella y el año 1945 inscrito en medio."