30 de enero de 2012

Escribe Jorge Riechmann sobre la insuprimibilidad de las mediaciones


En el Blog de Jorge Riechmann uno leyó hace días una reflexión interesante acerca de los límites del pensamiento de la izquierda tradicional en lo que hace a la utópica (en el sentido peyorativo del término) idea de la supresión de las mediaciones institucionales y legales (desde la moneda hasta los organismos de delegación de la representación). Uno ya escribió hace tiempo, a propósito del movimiento del 15M, que la idea de democracia directa y asamblearia permanente puede ser regulativamente hermosa pero perniciosa si ha de guiar la acción política: no es posible eliminar la delegación o la representación porque siempre habrá personas que no pueden hacer uso de su facultad volitiva (por enfermedad, edad o, simplemente, por preferir a la toma de decisiones, el sexo, el paseo o la música) y delegarán esa representación en otros.


"Retengamos esto: los seres humanos somos simios supersociales que, por discusiones enquistadas en comunidades de vecinos, las cuales a veces dan lugar a rencores macerados en su propia salsa durante años, llegamos a los extremos del arma de fuego usada con intención de asesinar a aquel o aquella que vive en la puerta de al lado.

¿Por qué resulta importante retenerlo? Porque con demasiada frecuencia, desde la izquierda, nos abandonamos a fantasías ultrademocráticas de eliminación de todas las mediaciones legales e institucionales.

No puedo desarrollar más el asunto en este momento, pero tiene implicaciones enormes: acerca de la clase de democracia participativa que sería viable desarrollar, por ejemplo; o acerca de las reformas del inaceptable sistema monetario actual que deberíamos proponer. Sobre esto último, recuerdo la siguiente reflexión de Cornelius Castoriadis:

“Existe en el marxismo la idea absurda de que el mercado como tal, la mercancía como tal, ‘personifican’ la alienación; idea absurda, pues las relaciones entre los seres humanos, en una sociedad extendida, no pueden ser ‘personales’ como en una familia. Están y estarán siempre mediadas socialmente. En el marco de una economía, por poco desarrollada que sea esta mediación, se llama mercado (el intercambio).”[1]

Es un error de cierta izquierda –insistía Castoriadis– creer que todas las mediaciones impersonales deben abolirse. “No puede haber una sociedad compleja sin medios impersonales de intercambio. La moneda cumple esta función. (…) Que se le retire a la moneda una de sus funciones en las economías capitalista y precapitalista: la de instrumento de acumulación individual de riquezas y de adquisición de medios de producción, es una cosa. Pero en tanto unidad de valor y medio de intercambio, la moneda es una gran invención, una gran creación de la humanidad.”[2]

En una sociedad decente habría mucho más tiempo disponible para la participación política, y muchos más deseos de hacer cosas en común, colaborando con los demás. Pero incluso en tales condiciones óptimas, el tiempo para tomar decisiones seguiría siendo un recurso limitado, y la benevolencia hacia el compañero o la compañera de asamblea no sería infinita… A eso nos remite el lamentable incidente entre los vecinos de Puente de Vallecas (que por suerte se saldó solamente con dos heridos leves)."

28 de enero de 2012

En diálogo con Víktor Gómez (I)


Desde hace un tiempo uno está en diálogo con Víktor Gómez. Los recientes acontecimientos de la vida de mi hermano han dificultado, por la parte que me toca, la prosecución del diálogo. Sin embargo, el recital del pasado sábado ha proporcionado un poco de aliento para intentar seguirlo a propósito del poema sobre las Brigadas Internacionales que aun no está acabado.

De momento, consigno un texto que ha tenido la delicadeza de dedicarme:

"
Para J. Jorge Sánchez

«Was nie geschrieben wurde, lesen»
Walter Benjamin


Desistente para ser legible en su intermedio –al desnudo lo anterior al habla– las semejanzas como en un primigenio juego nos enseñarían lo suficiente –eso aún por aprender– tan profundo como el cero y sus preguntas


* * *

La luz es la canción de los muertos


* * *

Para unas palabras que puedan acercarnos algo sin romperlo antes que un idioma o la doma de un método de visualización ¿hace falta desanudar la sombra del árbol edénico? Da de beber al pájaro mudo desenreda sus alas de la copa del manzano acaricia a la novia y bordea el abismo en la desnudez de los recolectores Cava un diente de felino junto al cuerpo seco de tu madre Camina como un oso aprende a eludir el fuego y las tormentas No poseas nada que no puedas cargar sobre tu espalda No des nada que te sobre Apura ir descalzo para escuchar a la tierra y leer sin runas

* * *"

26 de enero de 2012

Mi hermano en casa

Finalmente, antesdeayer pude recoger a mi hermano y llevarlo a casa. Tras la operación su evolución ha sido buena. Se le extirpó un pólipo de considerable tamaño que, al parecer, le causaba su dolencia y, a falta de los resultados de la biopsia, los pronósticos más razonables son esperanzadores. Bien. No cabe decir mucho más. Tan sólo agradecer la atención de algunos de los lectores de este cuaderno que le han hecho llegar a uno su preocupación. Espero que este tema deje de ocupar espacio físico, mental y ciberespacial y que mi hermano sea protagonista por otros motivos en esos ámbitos.

25 de enero de 2012

"La tumba de Lenin"


El libro de David Remnick, La tumba de Lenin, le ha acompañado a uno estos últimos días de enfermedad. Es un libro más sesgado, tosco y menos sofisticado en sus análisis que, por ejemplo, La gran transición de otro periodista, este español, Rafael Poch-de-Feliu. Pulitzers aparte. Con todo ha sido una lectura agradable e instructiva.

Uno no puede estar seguro de que las citas reproducidas en el libro sean correctas (la mayoría no conllevan referencia académica adecuada y la traducción al castellano se hace sobre la del inglés que, a su vez, se ha efectuado sobre el original ruso) pero alguna de ellas resulta escalofriante y tiñe de sombras la figura de Lenin que una buena parte de la tradición marxista ha procurado mantener pura e incontaminada cargando sobre las espaldas de Stalin los excesos criminales del totalitarismo bolchevique.

Así, por ejemplo, el comisario de justicia de Lenin, Nikolai Krylenko, afirmó según Remnick: "Debemos ejecutar no sólo a los culpables. La ejecución de personas inocentes impresionará aún más a las masas" (p756).

Asimismo, el uso del concepto de "campo de concentración" es atribuida por Remnick a Lenin y Trotsky: "... los primeros europeos que utilizaron el término 'campo de concentración' fueron Lenin y Trotsky, y fueron también los primeros en poner en práctica el concepto. Tres meses después de que Trotsky utilizara el términ, el 9 de agosto de 1918 Lenin envió un telegrama al Comité Ejecutivo de Penza, exigiendo que los dirigentes rojos locales iniciaran 'una campaña de terror contra los kulaks, sacerdotes y guardias blancos; hay que confinar a todos los elementos sospechosos en un campo de concentración en las afueras de la ciudad'" (p456).

Con cientos de páginas dedicadas a poner en su sitio al sistema soviético, a la ideología que le sirvió de su base y a aquellos que lo dirigieron, al menos el bueno de Remnick ha tenido la honradez de confesar que una gran parte de la antigua intelligentsia disidente de la época soviética y amplias capas de la población no vivieron el tránsito al capitalismo precisamente con entusiasmo, lo cual es de agradecer para compensar un poco tanto fervor por Yeltsin y el modo de vida occidental:

"Uno o dos años de exposición a la publicidad norteamericana han conseguido lo que no lograron hacer décadas de propaganda comunista: causar indignación auténtica en parte de las personas honradas ante los excesos del capitalismo. Pero la intelligentsia está desconcertada ante todo esto y es incapaz de proporcionar orientación moral: 'Lucharon por una nueva vida y resultó que esa vida les decepcionó'" (p802).

21 de enero de 2012

Y un poema de José Naveiras


Y, finalmente, un poema de José Naveiras de los que leyó el sábado:

"Yo fui quién le hizo una traqueotomía a Paris Hilton.

Fue por su bien, por mi bien, por vuestro bien, por el bien de todos.

Sé que nadie me pidió que lo hiciera, pero alguien tenía que hacerlo.





Yo fui quién le hizo una traqueotomía a Paris Hilton.

Con mi nueva Black&Dekker.

Con una broca de cromo-vanadio de 8 mm.




Yo fui quién le hizo una traqueotomía a Paris Hilton.

Y ahora hay paz en el mundo y el mundo es mundo y se acabó el hambre en el mundo y las nubes se levantan en el mundo.

No fue por venganza ni por odio, de verdad.




Yo fui quién le hizo una traqueotomía a Paris Hilton.

Sangró un poco, pero yo no quería hacerla daño

Sangré un poco, pero ella tampoco quería hacerme daño.




Yo fui quién le hizo una traqueotomía a Paris Hilton

Y cuando acabé me miró dándome las gracias.

No hay de qué"

20 de enero de 2012

Dos breves poemas de Agustín Calvo


Y después de Eva Gallud dejo un par de poemas breves de Agustín Calvo, extraídos de su mastodóntico proyecto, "Las afinidades electivas":

"Poética

Hay una distancia tan sumamente grande entre lo que quiero y lo que consigo que estoy por borrar letra a letra todo lo que he escrito hasta este instante.



Poemas



LECCIÓN
Escribir,


desordenar el abecedario

(de Poemas para el entreacto)"

19 de enero de 2012

Un poema de Eva Gallud


De algunos de los participantes en el encuentro del sábado 14 en Barcelona voy a subir algunos poemas. Dejo aquí uno de Eva Gallud que me gustó especialmente:

"

en mi casa de muñecas

hay un pararrayos roto

una estancia decorada

como un restaurante chino

y cadenas en el sótano

cuando me aburro bajo

poco a poco las escaleras

me siento en mi butaca Luis XV

tapizada en cuero blanco

a mirar

a mi muñeco Ken encadenado

a veces le muerdo los pies

saben raro

como a pólvora

en la habitación de arriba

está Barbie-la-más-rubia

atadita a la cama

en bragas y camiseta

Ken espera que algún día

Barbie baje a desatarlo

o al menos

a frotarle su sintética entrepierna

lo que Ken no sabe

es que dios

no juega con muñecas"

18 de enero de 2012

Mi hermano


En cama, con gripe (¡menuda ayuda para cualquiera!), mi madre llama para confirmar que mi hermano ha sido operado con éxito y que "todo ha ido bien", que es lo que suelen decir los médicos. Uno no ha podido acudir por prescripción facultativa: sólo le hubiera faltado al verdadero enfermo una dosis extra de virus... Después de semanas de diagnósticos a cual peor finalmente su dolencia ha podido ser abordada quirúrgicamente con menos problemas de los que se anticipaban. Todavía hay que esperar para conocer el diagnóstico definitivo pero esta es una buena noticia.

16 de enero de 2012

El pasado sábado en "La Papa" con la gente de "La Vida Rima"


Volver a leer ante el público, volver a participar en un recital, no fue fácil. Una hora antes de la cita estaba en un bar con Esther y mientras daba cuenta rápida de una cerveza buscaba excusas para justificar una "espantada" de última hora: a uno le suele pasar. Sin embargo, también como en otras ocasiones, al final la fuerza del compromiso acaba imponiéndose y aunque camine como si fuera al matadero se levanta y camina, que es lo que cuenta.

Luego, como siempre: mucho mejor de lo esperado. Una hora y media o más de poesía, un muy buen rato, nuevas ideas, la ocasión de conocer a gente con propuestas poéticas francamente interesantes y la firme resolución de participar más a menudo en estos actos y dejar de ser una especie de eremita. Habrá que ver cuánto dura esta resolución...

Uno leyó un poema de Del Tercer Reich, otros dos de Las vidas de las imágenes - que publicará Ferran Fernández este año en Luces de gálibo - y un inédito que tenía ganas de "probar" cómo sonaría en voz alta y que forma parte de la serie de "Falsos haikus" algunos de los cuales se han subido a este cuaderno.

Lo mejor, con todo, no fue tanto que el público, educada y cortésmente, manifestara su aprobación, elogio y aplauso a los versos de uno (qué menos, en estos actos el público suele estar "entregado"), sino poder ver a los demás participantes.

Víctor LaGounda y Mag Márquez se recrearon en unas impresionantes performances (uno que nunca se ha sentido especialmente atraído por ellas se quedó pasmado) plenas de musicalidad, ritmo y gracia: sus poesías seguramente no están pensadas para ser leídas sino para ser recitadas y funcionan extraordinariamente con el mérito añadido de ser capaces, ambos, de improvisar como si se tratara de una jam session. Sana envidia por parte de quien es incapaz de recitar uno sólo de sus poemas sin equivocación...

Eva Gallud, que ha publicado en La Vida Rima Ediciones, Moléstenme solo para darme de comer, leyó algunos poemas soberbios al igual que Agustín Calvo Galán de quien conocía su proyecto de "Las afinidades electivas" aunque desconocía que era su responsable. La fina ironía de Eva y lo bien logrados que están los textos de Agustín, especialmente unos breves que he descubierto hoy, impulsarán a leerlos más pronto.

José Naveiras estuvo, como siempre, estupendo: es un poeta al que el directo se le da como a pocos y, reitero, que obtiene sus mejores realizaciones cuando da rienda suelta al humor, la suerte más difícil en poesía pero que él maneja con singular soltura cuando se pone.

Por último, otro poeta que ya conocía y que me pareció extraordinario la primera vez que asistí a una de sus actuaciones, Daniel Orviz, mostró su polivalencia (es un gran showman) y dejó una reescritura brillantísima del poema de Niemöller falsamente atribuido a Brecht en boca de un "comunista esquizofrénico" que espero obtener pronto y subir por aquí.

Bien, en fin, un auténtico placer. Esperemos que uno sea consecuente con esta satisfacción...

14 de enero de 2012

Escribe Martín López-Vega acerca de los premios literarios


En el Blog de El Cultural:


"A los poetas, creo yo, no hay ni que pasearlos, ni que premiarlos. Que trabajen en algo decente, como todo el mundo, y si luego lo necesitan, que escriban. Claro que si por mí fuera, prohibiría el fútbol profesional (¿qué es eso de hacer ricos a unos chavales por darle bien a la pelota? Y no me vengan con que eso tiene público; ahí están las cifras de deuda de los clubes) y tantas otras subvenciones a cosas que sin duda sobrevivirían sin tener que regalarles dinero de todos. Esos dineros, a bibliotecas y polideportivos, y ya verían lo cultos y deportivos que salíamos todos...

(...)

Lo mejor que se podría hacer por la poesía es eliminar todos los premios pagados con dinero público (si aún queda algún mecenas, allá él, es su dinero). A mí que los dineros públicos se vayan en limosnas a poetas me parece tan escandaloso como que lo hagan en “centros de alto rendimiento” para piragüistas. Aunque bien pensado, en vez de premios, un centro de alto rendimiento de esos para poetas igual daba mejor resultado...

(...)

¿Qué ocurriría si desaparecieran los premios? Para empezar, desaparecería alguna que otra editorial que vive del cuento. Luego, publicar se volvería más difícil. Probablemente hasta los treinta y tal uno no consiguiera publicar su primer libro, cuando ahora, si tiene libro para publicar a los dieciséis, lo publica. Tampoco veo que sea un problema. Libraríamos a los lectores de mucha morralla preparatoria, al primer libro llegarían quienes realmente tengan vocación y calidad (bien, vale, esto es más discutible) y en general salvaríamos bosques y otros etcéteras mentales y forestales bastante saludables también"

El artículo completo, excelente, aquí.

13 de enero de 2012

Crisis y ciclos


La memoria de uno almacena otros escenarios de crisis tan profundos como el actual y con parecidos tonos apocalípticos. Finales de los ochenta, mediados de los noventa, por ejemplo. En el primer caso, el apocalipsis casi se consuma el 23 de febrero de 1981. En el segundo, el período 1993-1996, uno lo guardaba como especialmente penoso pero no estaba seguro. Releyendo El día en que dejé de leer El País de Riechmann, se reconoce la gravedad de la situación económica y política y la existencia de un estado de ánimo apocalíptico que empieza uno a pensar que bien pudiera ser consustancial a las sociedades occidentales criadas bajo la losa de la soteriología cristiana plasmada ejemplarmente en el libro de Juan que cierra la recopilación llamada "Biblia" y que la persistencia de la noción de crisis en la Filosofía contemporánea (desde Dilthey hasta Spengler o Husserl por ejemplo) certificaría.

Respecto a las crisis... Quienes crecimos con los catecismos de Ernest Mandel y compañía tendemos a pensar que son cíclicas, meros episodios de reestructuración del modo de producción capitalista y que del sólo hecho de la crisis objetiva, sin mediar la voluntad subjetiva de poner fin a la situación, no se puede deducir ningún final endógeno del orden de cosas existente.

12 de enero de 2012

Carta de un funcionario en La Vanguardia


La carta al director de un funcionario publicada por La Vanguardia el pasado día 8 ilustra hasta qué punto los ciudadanos seguimos teniendo un margen de acción, en cuanto consumidores como mínimo, que nos corresponsabiliza de alguna manera en lo que está sucediendo. Si simplemente se pusieran en marcha sus propuestas, ¿qué ocurriría?:

"Soy funcionario público desde el año 1987. Calculo que desde el 2007 a la actualidad habré perdido más de un 15% de poder adquisitivo entre la reducción del sueldo en un 5% y las posteriores congelaciones. No obstante, no voy a quejarme, porque, como dicen muchos, soy un privilegiado al tener un trabajo de por vida. Lo dijo Artur Mas y lo mantiene el Gobierno del Partido Popular. Hay que recortar, reajustar y racionalizar. Y eso es precisamente lo que voy a hacer yo a partir de ahora. Voy a seguir los sabios consejos de nuestros gobernantes.

En primer lugar, y dado que uso bastante poco el coche, voy a venderlo o darlo de baja: con ello voy a ahorrar la gasolina de un año, el impuesto de circulación, el seguro y las periódicas entradas y salidas del taller mecánico. Siento mucho disminuir los ingresos de la Administración en impuestos y todavía siento más no poder darle más trabajo al mecánico del taller, pero ahora se impone la austeridad.

En segundo lugar, voy a bucear por mi ciudad en busca de los negocios de toda la vida: el zapatero, la costurera, la tienda de reparación de pequeños electrodomésticos, etcétera. Siento mucho no comprarme más zapatos y perjudicar a la señora que lleva la zapatería del barrio, pero creo que cuando los zapatos estén demasiado gastados los llevaré a que me pongan suelas nuevas. Se acabó eso de tirarlos a la basura, voy a aprovecharlos al máximo. Intentaré comprar la menor ropa posible y utilizar la que tengo para no gastar tanto y ser más austero, como el Gobierno.

Cuando lleguen vacaciones, procuraré ser más austero todavía y quedarme en casa leyendo libros y viendo documentales, y engrandecer así mi cultura.

Para seguir con las medidas de estímulo de mi economía, voy a llevarme el termo de café al trabajo. Eso no significa que deje de tomarme mi media hora de descanso, sólo que no iré al bar a tomarme el cortado de las mañanas. No creo que el señor del bar ni el de las máquinas expendedoras noten nada por el hecho de que un funcionario no vaya a tomar café o lo saque de la máquina. Creo que aunque lo del gimnasio va bien, optaré por ir a dar un paseo de media horita todos los días como aconsejan los médicos, y así me ajustaré unos 40 euros al mes.

Los fines de semana hemos decidido con mi esposa, en lugar de ir a comer a algún restaurante, pasear y cuidar la salud para no utilizar tanto los centros de salud, y con ello tampoco pagaré tantas recetas con copago. Como puedo ir a trabajar andando, aunque esté un poquito lejos, lo haremos y seremos todavía más saludables.

He olvidado apuntar que como vendo o doy de baja mi coche, tampoco me hará falta la plaza de parking que pago todos los meses. El propietario se alegrará de poder alquilarla a otra persona.

Bien, todo ese ahorro lo meteré en una caja fuerte y lo dejaré reposar. Un banco es mal sitio para depositarlo.

Hay que ser responsable y yo adopto las medidas que nuestros gobernantes dicen que son necesarias para acabar con el déficit y estimular la economía. Además, les diré a todos mis compañeros funcionarios que hagan lo mismo: cuantos más seamos los que nos ajustemos más crecerá este país, eso dice el señor que estuvo en no sé qué agencia de esas que dicen si las cosas van bien o mal y que ahora es ministro de Economía.

Espero sinceramente poder ayudar a todos desde mi privilegiada posición. Y que conste que no me quejo."

http://epaper.lavanguardia.com/epaper/viewer.aspx


10 de enero de 2012

Escribe Žižek sobre la crisis actual (y IV): los pilares del comunismo


Del libro de Žižek uno ha retenido fundamentalmente los acuerdos, las proximidades: la crítica al relativismo y al multiculturalismo narcisista de las "pequeñas diferencias" que aplasta la universalidad del proyecto emancipador extensible a la totalidad de la especie humana ("ni griego ni judío, ni hombre ni mujer"), el rechazo de las alianzas tácticas o la tolerancia con los fundamentalismos ("habría que rechazar el peligroso lema de que 'el enemigo de mi enemigo es mi amigo', que nos lleva a descubrir un potencial 'progresista' y antiimperialista en los movimientos islámicos fundamentalistas"), la potencialidad política de la interrupción del curso de los acontecimientos, de la pausa, de la necesidad de parar, la reivindicación de un programa fuerte del comunismo para dotar de contenido empírico concreto a la Idea o, sobre todo, la denuncia de las aberraciones criminales del sistema capitalista: "El colapso financiero hizo imposible ignorar la descarada irracionalidad del capitalismo global. Se pueden comparar los 700.000 millones de dólares gastados solamente por Estados Unidos para estabilizar, con el hecho de que, de los 22.000 millones de dólares prometidos por las naciones ricas para contribuir al desarrollo de la agricultura en las naciones más pobres, solamente 2.200 millones se han hecho realidad hasta la fecha" (p95).

No obstante, uno no ha podido evitar retener, también, una discrepancia severa en torno a la consideración de los pilares de la Idea comunista que, según Žižek la distinguen a lo largo de la historia desde Platón:

"Hoy, más que nunca, hay que insistir en lo que Badiou llama la Idea 'eterna' del comunismo o los 'invariantes' comunistas; los 'cuatro conceptos fundamentales' que actúan desde Platón, a través de las rebeliones milenarias medievales, del jacobinismo, el leninismo y el maoísmo: la estricta justicia igualitaria, el terror disciplinario, el voluntarismo político y la confianza en el pueblo. Esta matriz no ha sido superada por ningtuna dinámica posmoderna, posindustrial, o pos lo que uno quiera" (p145-146).

Nada que objetar respecto a la justicia igualitaria, la confianza en el pueblo o el voluntarismo político pero el "terror disciplinario" no cree uno que forme parte, necesariamente, del ideal comunista/comunitario a lo largo de su historia. Más bien es parte fundamental de una interpretación restrictiva y proclive a la tentación totalitaria de este ideal.

9 de enero de 2012

Para benevolentes, amigos, distraídos, ociosos, etc.


El próximo sábado 14 a las 21:30, después de casi un par de años sin leer en público, uno acudirá a la presentación de la editorial LVR[Ediciones en Barcelona, en "La Papa", C/ Tapioles, 12. Si no tenéis nada mejor que hacer pues por allí estaré aunque de momento sin idea alguna de qué recitaré.

8 de enero de 2012

Escribe Žižek sobre la crisis actual (III): lo utópico


En la crítica que uno realiza del utopismo como motor de la acción política no ha incluido nunca el utopismo capitalista porque lo da por sentado y no ha creído nunca necesario perder demasiado el tiempo en ello. Con todo, estas palabras de Žižek, que resumen aproximativamente esa posición, dan qué pensar: quizás no hacerlo concienzudamente ha sido un error.

"Después de denunciar todos los 'aspectos habituales' del utopismo, quizá ha llegado la hora de centrarse en la propia utopía liberal. Así es como habría que responder a aquellos que descartan cualquier intento de cuestionar los fundamentos del orden capitalista democrático-liberal, considerándolos peligrosamente utópicos: en la crisis actual, a lo que nos enfrentamos es a las consecuencias del núcleo utópico de ese mismo orden. Mientras el liberalismo se presenta como la personificación del antiutopismo, y el triunfo del neoliberalismo aparece como una señal de que hemos dejado atrás los proyectos utópicos responsables de los horrores totalitarios del siglo XX, hoy en día está quedando claro que la verdadera época utópica fue la feliz década clintoniana de los noventa, con su creencia de que habíamos alcanzado el 'fin de la historia', de que la humanidad finalmente había encontrado la fórmula para el orden socioeconómico óptimo" (Primero como tragedia, después como farsa, p92)

7 de enero de 2012

Escribe Žižek sobre la crisis actual (II)


Entre paseo y paseo algunos ratos para las reflexiones de Žižek, interesantes, lúcidas y, en algunos momentos, decepcionantes por el desfase entre la magnitud de la tarea que se propone (reafirmar la actualidad del "comunismo" como idea emancipatoria) y los instrumentos teóricos de que dispone (un sofisticado sistema de descripciones sustentado en Lacan, Hegel y Kant que a veces se muestra demasiado distante respecto a los acontecimientos extremadamente simples que pretende evaluar).

Escribe Žižek sobre la asimilación del "sesentayochismo" por parte del sistema político-económico que pretendía aparentemente derrocar:

"Así es como, a nivel de consumo, el capitalismo integró el legado del 68, la crítica del consumo alienado: la experiencia auténtica importa. Una reciente campaña de Hilton Hotels consiste en una simple afirmación: 'Viajar no solamente nos lleva del sitio A al sitio B. También debe hacernos mejores personas'. Hace solamente una década, ¿podía imaginarse alguien la aparición de semejante publicidad? ¿No es ésta también la razón por la que compramos comida ecológica? ¿Quién se cree realmente que las manzanas 'ecológicas', medio picadas y con un precio excesivo son realmente más saludables que las variedades no ecológicas? De lo que se trata es de que, comprándolas, no estamos comprando y consumiendo simplemente, al mismo tiempo estamos haciendo algo significativo, mostrando nuestra capacidadpara preocuparnos y nuestra conciencia global participando en un proyecto colectivo" (Primero como tragedia, después como farsa, p65)

6 de enero de 2012

"Bajo la lluvia" entre espejismos (y II)


No ceder al embrujo de las cumbres nevadas, a la ilusión de la transparencia del ser que se hace patente en su propia nitidez emancipada de la coerción del texto de la tradición, de la prosa del mundo, mostrándose, como mucho, en la palabra poética originaria y nunca por completo, es difícil cuando uno se refugia en ellas para huir de la violenta y embrumada facticidad con sus acontecimientos equívocos, sus mallas inextricables de afectos y frustraciones, sus citas, envíos y ambigüedades.

No ceder al fetiche montañoso de las cosas adecuadas a su esencia en la proximidad de la nada, en la lejanía de la historia humana, es arduo cuando al mirar el horizonte no descubres tensión alguna entre cielo y acero sino el despositarse del cielo sobre las montañas y su mutua acogida: la caída de la montaña en los cielos.

Quizás por eso Bajo la lluvia sea un libro incómodo.

4 de enero de 2012

"Bajo la lluvia" entre espejismos (I)


Aprovechando una pausa en el tratamiento de la dolencia ignota de mi hermano una rápida fuga al Pirineo y, en pocas horas, de nuevo viviendo el embrujo que Bajo la lluvia, que finalmente y dada la escasa seriedad de Amargord verá la luz durante este año gracias a José Naveiras y La Vida Rima Ediciones, trataba de denunciar: la fantasía de la entrega de la esencia en la cumbre, de la donación de la verdad más cerca de la nada que del ser.

3 de enero de 2012

Escribe Žižek sobre la crisis actual (I)


Leyendo uno de los últimos trabajos del prolífico Žižek, Primero como tragedia después como farsa (Akal 2011, trad. de José María Amoroto Salido) -aprovechando una pausa en la hospitalización de Pablo- halla uno corroborada su impresión de que la crisis financiera del capitalismo que padecemos no desembocará a corto plazo en una apertura de posibilidades revolucionarias:

"Por ello, cualquier ingenua expectativa izquierdista de que la actual crisis económica uy financiera abra necesariamente un espacio para la izquierda radical es, sin duda, peligrosa y corta de miras. El efecto primordial inmediato de la crisis no será el auge de la política emancipatoria radical, sino, por el contrario, el aumento del populismo racista, nuevas guerras, el incremento de la pobreza en los paupérrimos países del tercer Mundo y mayores divisiones entre ricos y pobres en todas las sociedades" (p23)

1 de enero de 2012

Una realidad descosida


Abundando en el asunto. Los pespuntes que me unen a la realidad y sus acontecimientos se han descosido bruscamente. Tan sólo parezco estar vinculado a aquellos a los que verdaderamente amo.